El Peeling químico se define como la aplicación de una sustancia, con capacidad exfoliante, y cuyo fin es el conseguir un pelado controlado de la epidermis o de la dermis superficial, para mejorar distintos aspectos de la piel que afectan a esos niveles. Con el peeling químico tratamos manchas, rejuvenecimiento, acné y otras irregularidades de la piel
Para algunos tipos de manchas puede indicarse asociar otros tratamientos como mesoterapia (microinyección superficial de compuestos específicos) para mejores resultados o tratamientos domiciliarios complementarios
Cuidados posteriores
Después de someterte a un tratamiento con peeling químico, es importante seguir algunos cuidados para garantizar una recuperación óptima de la piel y maximizar los resultados del procedimiento. Aquí hay algunas pautas comunes:
- Protección solar: La piel estará más sensible después del peeling, así que es crucial protegerla del sol. Usa protector solar de amplio espectro con un SPF alto y evita la exposición directa al sol durante al menos unas semanas después del tratamiento.
- Hidratación: Mantén la piel bien hidratada utilizando cremas o lociones recomendadas. Esto ayudará a mantener la piel suave y flexible durante el proceso de recuperación.
- Evita el maquillaje:Durante los primeros días posteriores al tratamiento o cualquier producto que pueda irritar la piel.
- Evita exfoliaciones: No te exfolies la piel ni uses productos abrasivos durante un tiempo después del peeling químico. Deja que la piel se recupere naturalmente.
- Evita el contacto con agua caliente: Durante los primeros días, evita lavar la cara con agua caliente, ya que puede aumentar la sensibilidad de la piel.
- Controla la inflamación:Puedes experimentar algo de enrojecimiento e inflamación después del peeling. Aplica compresas frías o geles calmantes recomendados para ayudar a reducir la inflamación y la incomodidad.
Peeling Químico: cuidado de las irregularidades de la piel